Cualquiera que sea aficionado al fútbol, al Real Madrid y al que también le guste leer la prensa deportiva —nunca tomándosela en serio, por favor— se habrá percatado que hay periódicos que están a favor del Madrid y los hay que está a favor del Barcelona. Digamos que no hay que ser muy listo para darse cuenta de que lo que suelen vender es populismo, la broma fácil y el pique rápido. Tiene la importancia justa y, dentro de eso, no hay que darle más vueltas.
Siendo madridista como es uno, tengo que reconocer que, en los últimos años, la supremacía blaugrana ha sido tal que, ya fuera un periódico u otro, siempre se alababa al Barcelona, a sus jugadores y a su entrenador, Guardiola. De hecho, yo mismo lo he hecho. Me parece —o parecía— de lo más normal.
Lector de prensa deportiva como soy, debo reconocer que tengo mis periodistas preferidos: Juanma Trueba, en AS; Santiago Segurola, en Marca; Cuéllar, en ABC; y el equipo de deportes de El País, formado por José Samano, Ramón Besa y muchos otros. De alguna forma, dentro de la mediocridad mediática existente, afirmaría que son grandes profesionales, escriben bien y ponen cierto orden dentro del caos que la información deportiva genera. Lo que quiero decir es que al día siguiente del partido de turno busco sus artículos. En particular, aunque no venga al caso, recomiendo a Juanma Trueba, el tipo lo vale: escribe sobre fútbol, sí, pero lo hace sin que el fútbol importe.
Además, en el último año, con la llegada de Mourinho al banquillo del Madrid —también con sus formas, todo hay que decirlo– las críticas a éste han sido continuas. Hasta cierto punto, me parecía normal. El tipo busca los focos y sabe cómo buscarlos. Ofrece la muleta y los periodistas van como toros.
Sin embargo, tanta alabanza al Barcelona cuando su juego no es el de antes y tanta crítica desaforada a Mourinho —incluso cuando tiene razón— comenzaron a hacerme sospechar. Escéptico que es uno, oigan. Entiendo que el Real Madrid no juega como el Barcelona pero, dejando a parte que jugar como él es pegarse un tiro en el pie, ¿realmente tiene que jugar así?
Como ya sabéis, también me interesa de forma particular la batallita que se traen Sogecable y MediaPro por los derechos del fútbol. Lo traté, entre otros posts, aquí, aquí y aquí.
Además, y esto no sé si lo sabéis, actualmente existe una vinculación muy estrecha entre los dirigentes de MediaPro y laSexta y los del Real Madrid. De hecho, unos y otros están mezclados. Por ejemplo, aunque ahora mismo no está en el Real Madrid, García Ferreras, el director de laSexta —presenta ‘Al rojo vivo’—, fue directivo en la primera etapa de Florentino. Tambien Prisa se vio en problemas cuando el Madrid firmó con MediaPro –fue un gran golpe en su guerra—. Digamos que entre el Real Madrid y MediaPro existe feeling. Y esa mirada de ojos entre uno y otro es a costa de Sogecable, del grupo Prisa.
Pues bien, con toda la tontería y locura que suponen los cuatro partidos seguidos del Madrid y el Barça, he notado cierto encabezonamiento en los periodistas de El País –también en AS existe— en, no ya alabar el juego del Barcelona, si no hacer hincapié en la mala baba de Mourinho y en la repercusión que esto tiene en la mala imagen del Real Madrid. Algunos ejemplos son éste, éste y éste. En periodistas tan centrados y que siempre han evitado la polémica, al menos llama la atención tanto ensañamiento. El artículo sobre Arbeloa, en el que se le compara con Mayor Oreja por jugar con intensidad una final de Copa del Rey, digamos que no tiene ni pies ni cabeza. Más cuando el incidente de Messi de unos días antes—creo que no lo hizo adrede— se pasó por alto. Incluso, en el artículo sobre Arbeloa, también se critica, de refilón, entre líneas, sin venir a cuento, a Mourinho y al Real Madrid.
Pero, ¿hay algo más? Creo que sí. El País forma parte del grupo Prisa –al igual que AS— y me temo que es otro capítulo más en la Guerra del Fútbol. Ya no sólo es una guerra audiovisual por los derechos del fútbol, creo que es una guerra —encubierta entre, ya sabéis, piratas y corsarios— entre dos de los principales grupos de comunicación del país. Digamos que se trata de hundir al contrario, ahora sí, con todas las armas disponibles. Incluso a costa de la reputación de sus periodistas que, todo hay que decirlo, es de lo poco bueno que le queda a Prisa. A lo mejor es, simplemente, que con tanta fiebre futbolera, se me está yendo la cabeza. O, peor aún, que soy muy mal pensado. Puede ser.
* También creo que Mourinho lo sabe, de ahí sus constantes comentarios sobre la prensa y la presión que existe en el Real Madrid, ésa que no ha tenido hasta ahora incluso militando en equipos europeos grandes.