Estas dos fotografías fueron tomadas durante mi estancia en Seúl. Se trata de CNN Café y, como escribió José Luis Orihuela hace algunos meses, es una buena pista «que convendría seguir de cerca para explorar nuevas formas de interacción entre los medios y la gente en los núcleos urbanos».
Siempre digo que Corea del Sur es la República del Café: no producen ni un solo grano, pero lo consumen por todas partes. Uno se puede encontrar decenas de franquicias que preparan apetitosos cafés, ¿por qué no uno con la marca de una cadena de televisión?
Es una pena que no se pueda apreciar —no todo el mundo es tan freak como yo: no me pude detener todo lo que hubiera querido en el momento que tomé las fotos, había gente no del todo conocida esperándome y pensando que era idiota porque tomaba fotografías al local en el que había pedido un café para llevar—, pero la cafetería dispone de varios ordenadores —Mac, por cierto– donde consultar Internet y ponerse al día de las últimas noticias mientras se espera la entrega del pedido —o se disfruta de él–, así como televisores en varias paredes del local donde, por supuesto, se mostraban los informativos de la famosa cadena —y no de ninguna otra.
Como digo, por muy extraño que parezca, es un claro ejemplo de que algo se está moviendo, poco a poco, en las grandes empresas mediáticas. La comunicación ya no es lo que era, sin que esto tenga ser malo…